14 feb El ramo de Lupe

Lupe se casó el sábado pasado, un frío día de febrero pero muy cálido y colorido gracias a estas preciosas gloriosas que eran el centro de su ramo.

El ramo fue su regalo de boda de Isabel y Gonzalo que quisieron contar conmigo. Quedamos para vernos una tarde y verlo bien todo, su idea de lo que quería o no quería, que me contase cómo era su vestido, su peinado, el sitio de la ceremonia, etc. El vestido se lo diseñó Nacho Aguayo, una auténtica joya de vestido, lo digo en serio y no porque sea amigo mío, súper original, femenino y ultra favorecedor, por lo que el ramo tenía que ir en esta línea y ser diferente sin resultar estridente. La idea surgió de Nacho, le llamé por otro tema y comentando lo de mis ramos me preguntó si me gustaban las gloriosas, en ese momento no supe responderle porque no tenía muy claro qué tipo de flor era ( es difícil conseguirla y no es muy conocida) y me dijo que a él le fascinaban. Por lo que esa tarde a parte de otras muchas flores y combinaciones originales le enseñé a Lupe las gloriosas, no lo dudó ni un momento, QUERÍA SU RAMO DE GLORIOSAS.

Desde enero estuve como loca buscándolas por todas partes ya que como os he dicho no es una flor que se vea mucho por aquí, por desgracia estamos faltos de cultura floral, y porque no es de temporada. No estaba del todo claro que la fuésemos a tener por lo que pensamos en otras opciones, ramo de flor de guisante de varios colores ( totalmente recomendable!!!!! es una ramo precioso por si alguna se casa y no sabe cómo hacérse el ramo), de coles ornamentales.

Y al final, como siempre, tuvimos suerte y llegaron unas poquitas gloriosas a Madrid.

En el centro coloqué un grupo de anémonas del mismo color para acompañar y aportar estructura al ramo ya que las gloriosas, literalmente, van a su bola, perfectas para un ramo desestructurado y con caída, pero no para éste en concreto que lo queríamos tipo bouquet( redondito) y pequeño. Esta vez la atada iba con un lazo troquelado blanco y algo rígido que facilitaba un romántico lazo.

Resultó un ramo impactante que a nadie dejó indiferente, cuando iba hacia la casa de Lupe me entraron los miedos pero en cuanto se lo di y lo vió su cara me dejó tranquila, ¡estaba feliz! le encantó y así me lo hizo saber una y otra vez. Me llegaron muchas felicitaciones de gente de la boda por él por lo que estoy muy contenta.

¿Os ha gustado?

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